viernes, 24 de septiembre de 2010

Alemania como cárcel


Hace algunos años, estuve conversando largamente con el amigo de amigos, que era nada menos que superintendente en la Iglesia evangélica de Rhenania. Superintendente es lo que, en la Igl. católica se denomina Decano (al menos, en Alemania).

Me contó que él "había casado" (técnicamente se habían casado ante él) a un alemán y una boliviana. Y que la boliviana le había dicho que Alemania le parecía a ella una cárcel. Me preguntó si yo pensaba lo mismo...

Claro, no la culpo, en un país donde todo está prohibido y el estado se ha convertido en una suerte de Big Brother... Y si no es el estado, es la sociedad la que te controla y te impone el comportamiento que ellos consideran "adecuado".


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