Vendiendo calcetines de puerta en puerta

Hoy, ya en la casa, después de volver de la oficina.

Un hombre ya mayor toca el timbre; me dice que es de un circo ambulante, que no les ha ido bien y que tiene algunos productos que quiere vender... en una bolsa tipo bolso de gimnasia.

Cuando te dicen algo así, te imaginas que vende... cualquier cosa. Yo, como aún no había almorzado, pensé en algún frasco de algún alimento.

Le dije que quería verlos. Abrió la bolsa (todo en la puerta, yo no lo dejé entrar, por seguridad). Eran calcetines, de esos de algún discounter. El precio que tenían marcado era 17,95 euros.

Le pregunté:

¿a cuánto vende cada paquete?

Él: a 10 euros.

Pensé inmediatamente. Claro, ellos los compraron en alguna liquidación de algún supermercado a 5 ó menos euros. Ellos ganan y... para mí, es un buen precio. Además. calcetines siempre se necesitan. Escogí un paquete, se lo pagué y nos despedimos.

Sí, no es imposible que lo hayan robado, que sean productos robados... Puede ser que no. Pero, como en el mundo del derecho occidental, toda persona es inocente hasta que se pruebe lo contrario y como -personalmente- prefiero confiar en las personas y no desconfiar...

Al despedirnos, le deseé además que tuviera una bonita tarde y que vendiera todos sus productos.

Pero la situación en Alemania anda mal y empeorará. Ayer, se dió a conocer de endeudamiento (que conduce a la llamada insolvencia personale) para el 2009, realmente alarmantes. Me temo que vamos a tener a mucho más viejitos vendiendo calcetines puerta a puerta en los próximos meses.