jueves, 26 de diciembre de 2013
La dosis...
Hace algunos meses, se conoció una terrible y trágica noticia. Un médico, en una clínica recibió por fax la información, de parte de una oftalmóloga, con el nombre y la dosis exacta de un medicamento -gotas- que le debía administrar a un recién nacido.
La solución era, por poner un ejemplo: 0,01%. El médico se equivocó y leyo 0,1%. Administró la dosis al recién nacido... y, como se equivocó en la dosis, le causó una ceguera el niño. El médico se dió cuenta de su error, tomó al fax que le había enviado la oftalmóloga y alteró la dosis, para que pareciera que el error había sido de ella.
Como se pueden imaginar, este intento de culpar a la doctora fue descubierto...
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2 comentarios:
Qué espanto, pero todo puede suceder.....peor que eso es el caso de la mujer que cegó a un chinito de 6 años, como mis nietas, por un tema de celos o algo similar. ¡Eso es maldad! lo otro es mala pata, negligencia culpable y definitivamente estupidez al intentar endosarle el bulto al fax y su autor.
Feliz 2014
Gracias :)
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