jueves, 12 de febrero de 2009

El chico del bolso deportivo


Venía yo una noche (poco después de las 9), "bajando el cerro", de Kirchheim a Flamersheim, de vuelta a casa. (No hay luz en la calle que es una calle típica del campo, para que se hagan una idea de lo poco que se veía). En aquella época, aún no habían construido el camino para bicicletas que ahora existe al lado derecho (bajando).

En eso, gracias a mi buena vista y a mis excelentes reflejos, logro evitar a un chico que camina, en mi misma dirección y por mi mismo lado. Gran error, porque, si hay que caminar por una calle (para vehículos motorizados), hay que hacerlo siempre en la dirección contraria a los mismos.

Freno, bajo el vidrio (la ventana izquierda) y le digo:

¡Estás loco! ¡No se te ve! ¡Te van a atropellar. Ven sube.

Él sube. Supongo que lo traté de tú (en Alemania, no se trata de tú a la gente), porque... porque... porque yo soy así.

Era alto, se veía bien, pelo corto, muchos músculos y una bolsa de deporte. Tendría unos 18, según mis cálculos (no la bolsa, sino el chico).

Le pregunto:

Vienes de hacer deporte? Pensé que, a lo mejor, en ese pueblo perdido que es Kirchheinm había algo como un gimnasio, creo que sí había, cerca del colegio...

Él: No, me fui de mi casa...

Yo: ah, ¿y dónde te vas?

Él: a Bonn...

Yo: yo voy hasta Flamersheim, tal vez desde ahí puedas tomar algo a Euskirchen y de ahí a Bonn...

Él: sí.

Yo: ¿y qué te pasó?

Me contó algo de la novia, del papá de la novia, de sus papás, que no entendí mucho.

Lo dejé en Flamersheim. Hasta el día de hoy sigo pensando en él. Pobrecito. Pensé que debería habérmelo llevado a la casa y haberlo ayudado. Espero que haya tenido donde llegar en Bonn. Mis amigos me siguen diciendo que estoy loca... y que no debería haberlo llevado en el auto. Yo soy confiada y por eso, nunca me ha pasado nada malo con desconocidos.


6 comentarios:

Hilda dijo...

no te enseñó tu mamá que no debes hablar con extraños? jajaja, ya en serio, eres suertuda! conozco a más de una que no tuvo esa suerte. Saludos cariñosos. Hilda

Goffys dijo...

tienes suerte...

y te entiendo perfectamente!

y acaba de morir una gata que habia recogido de la oficina hace 22 dias.

Estaba recien nacida y en la oficina la querian matar.

Tengo dos gatos grandes... y siempre me han gustado los animales, los considero como hermanos menores.

Su cuerpo sera enterrado en un cementerio de mascotas.. La casa que no tuvo en vida, la tendra en su lugar de descanso.

Saludos.

Marta Salazar dijo...

no, es que en mi casa, nunca me lo ensenaron! siempre había política de las puertas abiertas, lo que es muy positivo :)

lo de "no hables con extraños", recuerdo que siempre lo decían en las películas norteamericanas y a mí, desde siempre, me pareció tan raro ;)

pobre gatita! lo siento :(

esteban lob dijo...

En "nuestro" Chile, Martita, lamentablemente nos hemos internacionalizado en términos de delincuencia.
Cada día es más raro que alguien lleve a desconocidos en su vehículo.

Saludos.

Marta Salazar dijo...

sí, ya lo sé; acá más aún, porque al miedo a los delincuentes, se suma el miedo a que te demanden si tienes un accidente con ellos arriba... por lo del seguro ;)

Ludmila Hribar dijo...

Bien Marta, aparte de un corazon generoso el coraje por coraza. Por aqui estamos perdiendo esa virtud... por razones obvias. Pensar que antes "hacer dedo" era csi parte de las vacaciones.