domingo, 28 de septiembre de 2008

La probidad no sería para católicos (más corruptos), sólo para anglosajones y euronórdicos, en el mejor de los casos


Queridos amigos: el debate producido que ha tenido lugar/ que tiene lugar en el foro de este artículo, Corrupción y transparencia en el sector público (me referí yo al tema antes en Corrupción y probidad en el mundo - El ranking de Transparency International), me da qué pensar y me recuerda (por lo que un lector dice de los WASP y lo que advierte JJ acerca de "Quien pone -no los criterios genéricos- sino más bien los específicos, el detalle, suele arrimar las cuestiones a su mentalidad, incluso aunque no quisiera")...

... tengo otra forma de ver las cosas y sí creo que los criterios objetivos para hacer un ranking -en una sociedad global- acerca de la "percepción de la corrupción" en las diferentes sociedades, en los diversos estados.

Hace poco tiempo -esto es lo que quiero contar en este post- una agradable tarde de domingo, en Colonia, conversando con un profesor emérito de Derecho (la posición de JJ NO es la de mi amigo el profesor, esto lo quiero dejar muy en claro, lo citó porque el debate en su blog, me recordó esta conversación), de ascendencia extranjera (de un país del Este, pero de nacionalidad alemana, lógico, sino no hubiera podido ser prof. universitario... en aquel entonces), tuve que defender la postura, en la que yo creo, de la lucha total contra la corrupción.

Él decía que la corrupción era mala sólo cuando involucraba a funcionarios del estado; pero no necesariamente, cuando en ella participaban solamente personeros de la empresa privada. A fin de cuentas -argumentaba- no hacían mal a nadie pagando algún soborno en el interior o en el exterior, para que su empresa lograra alguna contratación.

Yo le dije que pensaba que, en ningún caso, la corrupción podía ser aceptada en la empresa privada. Menos aún en el exterior. Y mencioné el informe de la misma TI sobre la corrupción de los países inversionistas, el llamado Bribe Payers Index (BPI).

Le expliqué que, si una empresa grande -todos pensamos inmediatamente en la muy corrupta
Siemens- gana una propuesta en otro país (casos hay por cientos) debido a que pagó un soborno, ya sea a un funcionario gubernamental o a uno (como ha ocurrido, también por cientos) en la empresa privada, está jugando sucio, pues está sacando una ventaja indebida, comete un delito y no respeta el fair play.

Fair play es, para mí, un término que escucho desde.... desde que estaba en el colegio y es uno en que que me formé y me gusta mucho. Y no estuve en colegio británico, ni nada por el estilo.

El profesor se echó a reir y me dijo:
¡Ud. es muy anglosajona! Eso del fair play no es para nosotros los católicos rhenanos, ja ja ja.

Muy divertido, ja ja, o sea que no ser corrupto, ser probo,
¿es algo para anglosajones? ¿O para WASP? Pero, ¿en ningún caso para católicos?

Es exactamente lo contrario de lo que aprendí durante toda mi vida consciente en mi país: que ser probo y no corrupto era una obligación para todos, de derecho natural, podríamos decir, nacida de la justicia. Y que los cristianos y todos quienes creemos en Dios, estamos aún más obligados a ser probos, porque, en nuestro caso, no serlo es una ofensa a Dios, un pecado.

Yo a veces no sé dónde he venido a parar en Europa.

Y que nadie me venga a decir que de ello están excluídos los católicos rhenanos, ni ningún otro. Es por eso que algunos países avanzan y otros retroceden. Cuando no hay probidad, cuando reina la corrupción, cuando se cierra un ojo y después el otro, acabamos... en el más hondo de los pantanos de la corrupción, donde no vale la pena trabajar, ni ahorrar, ni invertir, ni siquiera vivir.

Pienso yo al menos. Y Uds.,
¿qué piensan?


8 comentarios:

Morgenrot dijo...

Marta, la corrupción es un mal muy extendido, por todo el mundo, pues está en el interior del hombre.

También es cierto que la educación individual y social matizan la calidad y cantidad de corrupción.

Tu te asustas de Alemania y creo, por mi experiencia, que es de los paises de Europa con menor índice de corrupción . Si conocieras y vivieras la Europa latina, ya me contarías, ya...

Hilda dijo...

Marta, coincido contigo, soy católica y vivo en un país muy corrupto y no lo justifico ni pienso que lo traemos en los genes, considero que es un defecto gravísimo de la educación. Yo pienso que las cosas deben ganarse, trabajar por ello y creo que la corrupción tiene siempre graves consecuencias, basta ver a un delincuente libre porque pudo pagar un soborno, esta persona seguirá delinquiendo y dañando más a los demás. Basta ver a una persona sobornando a un médico para que acepte un medicamento peligroso y muchos salen muertos. Y así me podría seguir.
Yo pienso que la religión debe ser vivida en sus preceptos, no tenerlos solo de dicho. Y todos debemos ser honrados, no importa de qué religión seamos.
Esa es mi opinión.Saludos cariñosos. Hilda

Marta Salazar dijo...

totalmente de acuerdo querida Hilda!

liebe Morgenrot, sí, Alemania está en un buen puesto; pero, como siempre, no nos podemos dormir en los laureles, como le ha pasado a Chile que, de un puesto 13, ha pasado al 20 y tantos y sigue bajando...

Un abrazo a las dos y miles de gracias x los comentarios!

DasGretchen dijo...

Que como siempre llevas toda la razón. Incluso más allá del bien y del mal...

Marta Salazar dijo...

bueno, no siempre!

si no me crees, pregúntale a los habitantes de mi casa, que piensan que NUNCA tengo razón, je je

Besos!

DasGretchen dijo...

jejeje
idem

Ludmila Hribar dijo...

Marta tienes toda la razon del mundo. La corrupcion es un mal y esta demostrado. Pero no soy tan optimista en cuanto a como salir de ella. Es como una bola de nieve. Corrupcion 0!!!??? Casi una utopia.
Si claro estoy totalmente de acuerdo que tampoco deberia existir en el ambito privado. Pero alli es mas dificil identificarla, p.ej. cuando se devuelven favores por favores hasta que se convierte en costumbre, moneda de cambio sin moneda. Siempre haces pensar. Un abrazo.

Marta Salazar dijo...

estimadísima!

por supuesto que nunca podrá ser desterrada del todo, como nunca terminaremos con los delitos, siempre habrá un % de delincuencia en la sociedad;

pero hay que combatirla y reducirla a los niveles más inferiores que sea posible;

el profesor (de derecho!!!) es de ascendencia húngara, muy muy simpático;

pero que me diga que los católicos podemos ser o admitir o colaborar a la corrupción... eso es para mí, inaceptable :)

hay que luchar por un mundo mejor y en esta lucha, los primeros deberíamos ser los católicos, pienso yo;)

Un abrazo!