lunes, 28 de enero de 2008

Los Verdes


Queridos amigos:

Otro artículo antiguo que copio aquí (de 15 de octubre del 2006), sobre todo porque, ahora que estamos analizando el resultado de las elecciones en Alemania -en mi blog de política, economía y sociedad- me parece importante explicar un poco cómo son las colectividades políticas en Alemania y qué segmento de la población representan.

Los verdes en Alemania no son un "partido de los trabajadores", ni mucho menos. Por el contrario, con una colectividad bastante burguesa.

En el fondo, son los hijos (y cuando digo hijos, me refiero a hijos de verdad, a hijos biológicos) de los conservadores, tanto demócrata cristianos, como social cristianos, como socialdemócratas.

Viven generalmente en las grandes ciudades, donde están sobrerrepresentados entre los intelectuales universitarios y pudientes. Sí, no se olviden -para que se hagan una idea de qué estoy hablando- que los productos biológicos que ellos compran son de lo más caros.

Sí, en los distintos países del mundo, las colectividades políticas, aunque tengan el mismo nombre, son, en realidad, muy distintas. En países como la República Checa, por ej., los verdes son un partido burgués.

Los artículos en Planisferio continúan haciéndome recordar acontecimientos pasados.

Esta vez le tocó a ¿Quién es de Derecha? de Carol, aparecido también en el diario La Segunda (¿Quién es de Derecha?), donde también ha dado mucho que hablar (ver foro de la Zona de Opinión).

Lo que contaré, aconteció hace poco más de doce meses (en el marco de una fiesta de verano) en Bonn.

Estaba yo conversando con un vecino mío de Mehlem (o Mejlém, como le llamamos por el 40% de árabes que viven aquí) al que acababa de conocer. Sí, antes sólo lo había visto a la salida de la misa del domingo. Nada más. Pero era primera vez que conversaba con él. No sería la última.

Mi vecino es muy simpático y lo encontré bastante clever, además, se ve bastante bien y anda bien vestido (lo que no es la regla general en Alemania).

Menciono estas superficialidades porque no se compadecen con lo que otro amigo mío pensó de él...

Sí, estando yo conversando con este vecino, llegó otro amigo mío a parlar con nos. Este amigo mío es español y vive, debido a su trabajo, durante unos años en Alemania. Es realmente encantador y me cae super bien.

Comenzamos a hablar de política, porque ese día tenían lugar no me acuerdo qué elecciones en Alemania.

Mi amigo español comenzó a hablar super mal de los Verdes. De todas maneras estaba siendo muy injusto con ellos.

Yo, intuía, por las respuestas que -muy educadamente le daba mi vecino alemán- que mi amigo español, además de ser injusto, estaba metiendo la pata.

Seguimos hablando hasta que decidí cortar por lo sano y hablarle claramente. Le dije que yo pensaba que los verdes, en realidad, no eran como él creía, al menos, no los verdes alemanes, al menos no todos ellos.

Que eso que él decía, pensaba o insinuaba: la vieja consigna verdes por fuera y rojos por dentro. Eso no es así y no sé si algún día lo fue.

Como yo le aclaré esto. Por supuesto que todo en forma super educada. Mi vecino le dijo que él era verde. Me gustaría haber fotografiado la expresión facial de mi amigo español.

Mi vecino le explicó que los verdes contaban cada día más con un importante segmento de partidarios y votantes de origen burgués... y vida burguesa, diría yo. Que muchos de ellos -como él- venía de sectores eclesiásticos, esto es, cristianos. Y que, de ninguna manera eran rojos por dentro. Que veían realizados, en la filosofía política verde, muchos ideales cristianos.

Evidentemente que esto -a mi modo de ver- es discutible, pero no se puede (1) anatemizar a nadie, (2) ni tampoco, arrogarse el monopolio sobre la expresión de los cristianos en la política, como lo ha hecho, durante tanto tiempo, la democracia cristiana en el mundo. Y, en Alemania, primero el Partido de Centro y después (de la II Guerra), la CDU y la CSU (Unión social cristiana, en Baviera).

Mi amigo español que no se esperaba una respuesta así, ni mía ni de mi vecino que no se ve (por eso la descripción de su apariencia personal más arriba) como él se imaginaba que se vería un verde.

Mi amigo comprendió que había juzgado mal a los verdes alemanes. Y nosotros dimos un paso adelante en la cultura democrática del diálogo abierto y sincero.

Independientemente de si nos gustan los verdes o no.


2 comentarios:

alejops dijo...

Pero eso, en Alemania. Porque aquí en España la situación es muy diferente, al menos de momento. Imagino que tu amigo hablaba más bien de lo que él conocía por España.

Marta Salazar dijo...

así es dear alejops!

así que en Espana es distinto? sería muy interesante saber algo más de ello, un tema para "política comparada",

saludos!