Ayer me acordé de este post de Fernando (Soberbia litúrgica, mi opinión en el foro del mismo), porque, el párroco, en la misa de la tarde, anunció, con voz suave y acogedora:
"El evangelio de hoy es muy largo, así que, quienes quieran pueden sentarse".
Es que el Evangelio se escucha (salvo que tengas un problema a la rodilla o que estés embarazada o seas mayor o simplemente, tengas una buena razón para sentarte) tradicionalmente de pie, debido a que, en la tradición occidental, estar parado/a implica poner atención. Pero estos son convencionalismos que pueden cambiar, no son parte de ninguna verdad dogmática, ni nada por el estilo.
Pensé en que, como dice en el Evangelio: "El sábado es para el hombre y no el hombre para el sábado".
No hay comentarios:
Publicar un comentario